lunes, 7 de agosto de 2017

El dedo de Dios


Artículo de Antonio Barreda


No. No ese monumento famoso de Canarias. Ni tampoco es ese famoso tornado F5 conocido como el dedo de Dios que todo lo destruye a su paso. Es ese dedo que desde el palacio de San Telmo apunta a ex cargos del PSOE de la Junta de Andalucía y los va colocando por esa enorme estructura de administración paralela que Chaves y Griñán idearon para los suyos, allí donde dejan el enorme cementerio de elefantes en que se va convirtiendo la Junta de Andalucía tras llevar casi 40 años de poder absoluto. Hoy en Andalucía, más que nunca, tener el carnet del PSOE es sinónimo de un puesto de trabajo seguro y muy bien remunerado.

Que se lo pregunten a todos los ex consejeros de la Junta que tras la última remodelación del gobierno de Susana Díaz encontraron todos acomodos en buenos cargos y buenas nóminas tras los dos consejos de gobierno. Todos colocados y todos en la segunda fila de la Junta de Andalucía, donde no están ni los focos ni las cámaras, ni la oposición. En esa oscura administración creada para colocar a todos los que van dejando de ser útiles en la cúpula de la Junta de Andalucía. Susana se cuida de no crearse oposición interna tras el fuerte fracaso de las primarias. Que Pedro se quede fuera de despeñaperros.

Hace años Pedro de Tena y yo elaboramos la teoría de la tela de araña en Andalucía que se puede leer aun en Libertad Digital, incluso publicamos dos libros sobre el tema. Una tela de araña tupida que se extendía por toda Andalucía para formar un régimen. Y esa tela sigue viva hoy más que nunca con una araña que teje desde San Telmo la tela que a todo lo engloba en Andalucía y que define, además una economía subdesarrollada y fuertemente subvencionada. No hay liberalismo económico en Andalucía, ni Laissez Faire, la Junta de Andalucía lo es todo. Solo hay que pararse a mirar el boja, el boletín de la Junta que hoy en día es una hemeroteca donde los historiadores futuros desentrañarán el régimen, como nosotros mismos ya describimos.

Lo único que ha cambiado es la oposición en Andalucía. Dos nuevos. Dos formas distintas de ver la política. Pero IU y el PP han seguido en el Parlamento de Andalucía desde sus orígenes. Y ninguno de los dos quiso ver o vio la tela de araña que se iba formando bajo sus pies fuera del Parlamento. Solo la etapa de la mal llamada pinza IU-PP logró llevar al Parlamento los desmanes de una Junta de Andalucía que iba por libre desde que Chaves llegó como castigo a Andalucía. Luego de nuevo mayoría de Chaves y se enterró el Parlamento y cualquier comisión de investigación. Y, a la vez, se iba agrandando el monstruo en que luego se convirtió la administración paralela.

Ni IU, ni PP durante estos años de oposición le hicieron mella al PSOE. La araña se instaló en San Telmo y allí sigue desde entonces. Recuerdo una conversación con el ministro Zoido cuando presentamos el primer libro. Muy convencido de destruir la tela de araña en Sevilla tras Monteseirín y crear en el ayuntamiento de Sevilla su propia tela de araña. Pero cuando llegó se emborrachó de poder con 20 concejales y lo primero que hizo es matar a su propia araña. El resultado es el mayor fracaso de la historia democrática en las municipales, dejándose 8 concejales por el camino.

El PP nunca comprendió el significado y la profundidad de las estructuras de poder creadas por el PSOE. Ni tampoco entendió que nunca debe dejar atrás a los suyos, convirtiéndose en un partido cainita por naturaleza. Es la diferencia con el PSOE en Andalucía. Nunca se olvidan de los suyos, nunca dejan atrás a los suyos. El PSOE coloca a todos los suyos y no los deja en el camino. El PP pronto se olvida de todos sus precedentes y busca enterrar su memoria. Se olvida de sus líderes y se olvida de todos los que un día los representaron. Pasan el polvo del olvido por las listas electorales y por los cargos y los puestos a repartir. Y esto lo convierte en un partido perdedor en Andalucía.

Los de IU ingenuamente creyeron a Susana cuando los necesitaba. Valderas y los suyos cruzaron a la otra orilla, desde los Remedios a San Telmo. Pero no había puentes de huida cuando Susana los atrajo a la tela de araña donde todos se quedaron atrapados. Nunca comprendieron ni dónde estaban ni porqué estaban. Nunca se creyeron que gobernaban, entre otras cosas porque Susana jamás se fio de ellos como socios de gobierno. En cuanto pudo se los quitó de encima. Y además nunca se olvidó del mejor de sus socios, Valderas, al que hasta llamó para ser Comisario de la Memoria Histórica porque sabía el cisma que provocaría en IU.

Así que el dedo de Dios está hoy más vivo que nunca y apunta siempre a los de sus filas, sabedores de que nadie hoy en Andalucía es capaz de descolocarlos donde los sitúa.




1 comentario:

  1. Cuanta verdad!aquí al que pillan con el carrito del helado le montan un kiosco.

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