Artículo de Antonio Robles
Ahora que Artur Mas juega con las cosas de comer con la temeridad de un inconsciente o la ignorancia de quien no sabe historia ni sospecha la crueldad de la guerra entre hermanos, bueno sería zambullirse en la recién editada novela “Bandera Negra”, de León Arsenal, que recrea uno de los pasajes más descabellados de la Iª Guerra Carlista. Dice el autor a propósito del conflicto sucesorio que la provocó, que fue la excusa para dirimir las diferencias a tiros: “Podríamos decir que aquella se convirtió en la primera de varias guerras civiles en la que la población española ha tenido que elegir entre dos bandos para matarse los unos a los otros. O, visto desde otra óptica, tal vez la Primera Guerra Carlista fue el primer episodio de una única e interminable guerra civil que libran los españoles desde hace casi 200 años – reinventando bandos y recombinando facciones dentro de ellos – y en la que, cada cierto tiempo, se llega al conflicto armado”.
Bandera Negra es un prisma literario. Tomada por una de sus caras, esta novela es una ventana que se asoma a un episodio tan capital como olvidado en la historia de la España moderna: la I Guerra Carlista. Un conflicto brutal cuyo estallido y consecuencias marcaron el desarrollo de nuestra nación hasta el día de hoy.
Pero, tomada por otra de sus caras, Bandera Negra es un homenaje (reconocido por el propio autor) a la literatura de aventuras, que tan presente estuvo siempre en nuestras letras, por más que durante muchas décadas fuera desdeñada como algo indigno de la «gran literatura». Autodenominada gran literatura cuyas obra y autores, en su mayoría, yace en un olvido tan polvoriento como merecido.
Y esta novela también es la vindicación de un episodio tan fascinante como desconocido de ese conflicto. La guerra corsaria entre liberales y carlistas que tuvo lugar en aguas de Castellón y Tarragona. Confieso que yo mismo jamás oí hablar de algo parecido, aunque tengo el consuelo de que eso le pasa a todos, incluso a los amantes de la historia local y de la época. Pero sucedió de verdad y León Arsenal la usa para tejer su novela.
Una de las tramas gira en torno a las singladuras del Bien Parecida, un falucho armado por hombres de la milicia nacional de Castellón de la Plana y El Grao para combatir a los piratas carlistas. Estos, aprovechando la ausencia de la armada liberal, atacaban el tráfico de cabotaje entre Barcelona y Valencia, y también a cualquier buque que remontase el Delta del Ebro hacia Tortosa. Ahí nos vamos a encontrar personajes muy caracterizados, como el capitán Miralles, antiguo corsario y revolucionario; su sobrina Mercedes, convencida de la causa liberal o Furtabous, un cascarrabias, patrón de barca de mitjana y viejo compinche de Miralles.
Digo una de las tramas porque hay varias que se trenzan para dar forma a Bandera Negra. En ese sentido, el escritor fuerza la mano. No es una novela larga y, sin embargo, hay abundancia de historias distintas que se van entrecruzando. Y a todo ello hay que unir un empleo de lo más original de los encabezados que, aparte de ahorrar notas a pie de página o artificiosos diálogos explicativos, acaban por convertirse casi en una trama ellos mismos.
Que esto último no induzca a engaño a nadie. Hay acción, mucha acción. Esta es una novela histórica pero también de aventuras. Y su autor es León Arsenal, que está considerado uno de los mejores escritores de escenas de acción, sino el mejor, de nuestro país. Hay batallas y escaramuzas. Y batallas navales en las que es fácil oler la pólvora negra, ver las chispas que envolvían a los hombres a cada disparo de cañón, oír silbar la metralla y sentir el viento en las velas.
Y, como toda buena novela de aventuras, contiene algo más que acción. Nos lleva a una época terrible cuyas consecuencias todavía pagamos. Y, como no podía ser menos, el autor toma partido y su novela deja entrever opiniones y reflexiones extrapolables a la situación política que vive España, que presenta curiosos paralelismos con aquella de la I Guerra Carlista. Todo llevado gracias a un elenco de personajes bien elegidos y tratados. Algunos son ficción y otros reales y, entre estos últimos, los hay tan increíbles que uno tiene que ir a los libros de historia para asegurarse de que, en efecto, existieron y eran así.
Por si la extravagancia fascinante de personajes y trama no hubieran sido regalo suficiente, Bandera Negra tiene el aval del premio II Certamen de Letras del Mediterráneo, una iniciativa que trata de aunar la literatura con el marco incomparable de la provincia de Castellón donde se desarrolla el relato.
No hay comentarios:
Publicar un comentario