Artículo de Paco Romero
En los últimos tiempos la actualidad política ha estado
centrada en la crónica de los recortes populares y, aprovechando
de fondo el gran telón de la corrupción, en las descalificaciones mutuas
entre los dos grandes partidos, azuzadas por el dúo de los recién invitados al
pastel de la representación de la soberanía nacional.
En el segundo de los planos, el relativo a la corrupción,
Cataluña aparte, los escándalos del caso Gürtel, desgajado en una docena de
microcausas desparramadas entre Valencia, Mallorca y Madrid, se han mezclado
con los andaluces.
Los taxidermistas más afamados no tienen claro qué montero
les hizo el encargo de los trofeos que aún permanecen en sus talleres
sin retirar, donde destacan sobre el resto dos cabezas de “quince puntas” en
peanas de cedro.
La corrupción no se combatirá eficazmente hasta que
entendamos que se trata de un problema personal de conciencia y de moral:
no te compran si no te vendes... Y, lamentablemente, todos tenemos un
precio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario