Artículo de Luis Escribano
Al menos, es lo que advierte la Plataforma de Trabajadores del Hospital Clínico de Granada, que presentaron en junio un manifiesto a la Gerencia del Complejo Hospitalario oponiéndose al nuevo modelo de organización sanitaria hospitalaria, indicando que “se pueden producir situaciones graves de riesgo serio y real para los pacientes y en consecuencia para nosotros”
En el vídeo publicado por los trabajadores del Hospital Clínico de Granada se describen “diez mentiras
sobre el nuevo gran Hospital de Granada”
Mediante la Orden de 21 de noviembre de 2014 de la Consejería de Igualdad, Salud y Políticas Sociales, publicada en
el BOJA de 1/12/2014, se acordó “actualizar” la estructura de gestión y
funcionamiento para la prestación de los servicios de atención especializada en
el Área de Salud de Granada. En su artículo primero, se acordaba unificar las
actuales Áreas Hospitalarias Norte y Centro-Oeste de Granada en una nueva Área
Hospitalaria denominada “Área Hospitalaria Centro de Granada”, y los Hospitales
de referencia de las Áreas afectadas, que son los Hospitales «San Cecilio» y
«Virgen de las Nieves», se unifican en una sola Institución Hospitalaria que pasa
a denominarse “Complejo Hospitalario
Universitario de Granada”.
Los trabajadores del Clínico de Granada se han unido en una Plataforma para oponerse a este nuevo modelo que, al parecer, más que resolver crea nuevos problemas asistenciales a los pacientes.
Con esta noticia se muestra una vez más que, en materia de organización de los servicios públicos, la sensatez y el sentido común brillan por su ausencia en los cargos socialistas de la Junta de Andalucía. Si con la administración paralela han conseguido destrozar la Función Pública andaluza en perjuicio de los ciudadanos, la Sanidad andaluza no se va a quedar rezagada. Empezaron con las Unidades de Gestión Clínica a politizar la gestión profesional, y ahora llegan los “nuevos modelos hospitalarios”. ¿Dejarán algún sector de lo público sin despedazar?
Los trabajadores del Clínico de Granada se han unido en una Plataforma para oponerse a este nuevo modelo que, al parecer, más que resolver crea nuevos problemas asistenciales a los pacientes.
Con esta noticia se muestra una vez más que, en materia de organización de los servicios públicos, la sensatez y el sentido común brillan por su ausencia en los cargos socialistas de la Junta de Andalucía. Si con la administración paralela han conseguido destrozar la Función Pública andaluza en perjuicio de los ciudadanos, la Sanidad andaluza no se va a quedar rezagada. Empezaron con las Unidades de Gestión Clínica a politizar la gestión profesional, y ahora llegan los “nuevos modelos hospitalarios”. ¿Dejarán algún sector de lo público sin despedazar?
Por supuesto, todas estas acciones tienen un por qué y un
denominador común: el Régimen corrupto del PSOE andaluz necesita alimentarse de
actuaciones como las descritas para sobrevivir. La “cartelización” del partido
exige decisiones que no siguen la lógica de una buena administración: el nepotismo, la ineficacia y la ineficiencia, entre otros vicios, constituyen una buena muestra de todo ello.
Esta viñeta describe lo que se ha convertido en la "comidilla" de este verano respecto al traslado de enfermos por los taxistas en la ciudad de Granada, gracias a la decisión de la Junta de Andalucía.
En relación con el nuevo modelo de organización sanitaria hospitalaria, me informaban hace unos días que la “comidilla” de este verano es lo que al parecer les han dicho a los taxistas de Granada respecto al traslado de enfermos al Hospital, aunque no he podido confirmarlo (como paciente, entiéndase): si el enfermo padece algo de cuello para arriba o de cintura para abajo, tienen que llevarlo al Parque Tecnológico de la Salud (PTS), y a los enfermos con afecciones en los órganos internos ubicados entre el cuello y la cintura, deben trasladarlo al Ruiz de Alda (Hospital General). Parece ser que de esta manera es más fácil recordarlo, y que se aproxima bastante a la realidad.
Vídeo editado y publicado por trabajadores del Clínico.
Los trabajadores del Clínico han editado y publicado el vídeo titulado "NO en nuestro nombre", en el que
describen “diez mentiras sobre el nuevo
gran Hospital de Granada”. A continuación les dejo con el texto publicado en dicha página web, debajo del vídeo:
“Los trabajadores del Clínico queremos dejar constancia de
nuestra preocupación y nuestro total desacuerdo con el modelo de organización
sanitaria hospitalaria que la administración quiere poner en marcha en relación
al denominado Complejo Hospitalario Universitario de Granada.
Entendemos que la medicina actual, en términos de calidad,
se debe basar en equipos multidisciplinares en los que, para resolver o paliar
los problemas médicos de un paciente, trabajan con frecuencia varios
profesionales de distintas especialidades coordinados. Tratamos pacientes de
forma integral, no enfermedades aisladas.
Creemos que un modelo sanitario con un único HOSPITAL exige
la proximidad física entre los distintos edificios que lo integren, que permita
el traslado de profesionales y/o de pacientes de uno a otro en un tiempo
razonable. No creemos que se pueda asegurar con la actual dispersión de los
edificios, de hasta 11 km
de desplazamiento, con una media de 40 minutos en el peor de los casos.
Con el modelo que se nos propone existirían en Granada dos
“medios hospitales” y un materno infantil, cada uno con una parte de las
especialidades que existen en cualquier centro, que no podrían atender en
ningún caso de manera integral a un paciente, precisando traslados frecuentes
de enfermos o de profesionales. Esta situación se hace especialmente
preocupante en la atención Urgente, donde el traslado o el retraso en la
actuación de un profesional puede poner en grave riesgo la vida del paciente. Y
donde la sobrecarga de un solo centro producirá demoras inevitables en la
atención en Urgencias, de consecuencias nefastas para los usuarios.
No estamos en contra de la fusión o centralización de las
direcciones, gerencia o unidades de gestión. Incluso entendemos que
determinados servicios o unidades, por el menor número de casos que atienden,
pueden centralizarse en uno u otro centro como por otra parte se viene
realizando hasta ahora.
El desplazamiento continuo de profesionales que, según la
especialidad, tendrían que trabajar en los dos centros, implicaría además una disrupción
importante en la relación médico-enfermo, rompiendo el proceso de continuidad
asistencial y el seguimiento diario por el mismo profesional. Este hecho no es
accesorio, está demostrado que impacta negativamente en los niveles de
satisfacción de los usuarios, aumenta el número de reclamaciones y atenta
contra los principios de la buena praxis médica.
Por otra parte, desde el punto de vista de la formación de
EIR, pensamos que este modelo masifica las rotaciones en los distintos
servicios y despersonaliza el proceso de formación. Aunque reconocemos que esto
es debatible, sí es un hecho contrastado que la satisfacción, en cuanto a la
docencia recibida, es mejor en los hospitales digamos de mediano tamaño que en
los macrohospitales.
El argumento de que se pretende dar igualdad de atención a
los ciudadanos independientemente de que pertenezcan a la zona norte o sur
creemos que no compensa con los riesgos que tendrían que asumirse. Y que lo que
se debería exigir es igualdad de dotación para aquellas unidades que por
volumen de pacientes estén ubicadas en ambos centros.
Existe además una preocupación justificable: las
recomendaciones que el Ministerio de Sanidad establece en 2009 en cuanto a la
atención materno infantil: “minimizar los recorridos de las mujeres atendidas
en maternidad para garantizar la inmediatez de las actuaciones cuando se
requieran otras unidades y servicios”, dejan de cumplirse.
Entendemos que no se ha contado de manera real con los
profesionales en la elaboración del modelo en el que encontramos serias
deficiencias que ponen en riesgo la seguridad de los pacientes y la calidad de
la asistencia prestada. Siempre, desde su inicio, hemos manifestado nuestro
desacuerdo con el modelo. No entendemos sus ventajas. No creemos en él y no se
ha tenido en cuenta nuestra opinión.
Estamos preocupados como profesionales forzosamente
implicados en el proceso de convergencia. Se pueden producir situaciones graves
de riesgo serio y real para los pacientes y en consecuencia para nosotros. Por
eso rogamos, desde un ejercicio de responsabilidad, que se paralice el proceso
en los términos en que se está planteando y que se replantee en beneficio de
los pacientes, los profesionales, del sentido común y la cordura.
Por tanto, pensamos que el modelo más razonable exige un
Complejo Hospitalario con dos HOSPITALES: Caleta y PTS que, dotados de unidades
duplicadas (pertenecientes a una única unidad de gestión), puedan ofertar
asistencia integral y de calidad a nuestros pacientes. En ese modelo sí creemos
y no duden que ahí encontrarán nuestro trabajo, nuestro compromiso y nuestra
ilusión como hemos hecho hasta ahora.”
Coda: como
buen conocedor que soy de lo que suponen estas “cruzadas” con los políticos de
la Junta de Andalucía, les deseo lo mejor a los trabajadores del nuevo “Complejo
Hospitalario Universitario de Granada”, pero sobre todo, paciencia y
constancia, porque es una carrera de fondo. ¡Y esperemos que el sentido común
acabe imponiéndose...por el bien de los pacientes!
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