El EGOPA se equivoca

Artículo de Luis Escribano

Hace unos días, todos los medios de comunicación y las redes sociales (blogs, Twitter, Facebook, etc.) se hacían eco del resultado del “Estudio general de opinión pública de Andalucía” (EGOPA), correspondiente al Invierno de 2015, elaborado por el “Centro de Análisis y Documentación Política y Electoral de Andalucía” (CAPDEA), de la Universidad de Granada.

He intentado encontrar alguna noticia que hubiera reprobado dicho Estudio, pero “mi gozo en un pozo”. Es tan ingente el flujo de información que circula sobre temas sociopolíticos que casi nadie investiga y cuestiona los contenidos, dando por válido cualquier resultado, que se publican sin comprobar su certeza. Mi sorpresa ha sido mayúscula cuando he analizado el citado estudio y observado que parte de una distribución provincial de la muestra que no se corresponde con los datos reales. Por tanto, cualquier resultado del estudio queda falseado.

A ustedes les costará trabajo entender como una Universidad pueda llegar a estos extremos. A mí, no. La tela de araña que el PSOE-A, desde los ámbitos de poder que ocupa, ha extendido a todos los ámbitos de la sociedad andaluza, alcanza igualmente a la Universidad. No son escasos los profesores universitarios que se arriman al poder de turno, es decir, a quien le facilita la promoción, las subvenciones para proyectos, contrataciones y publicaciones, el prestigio, la participación en másteres, debates y conferencias, etcétera. Las motivaciones de ese acercamiento pueden ser variadas, como la supervivencia de departamentos universitarios de escasa calidad, como la amistad o la coincidencia ideológica con el que gobierna. Pero - ¡ay, siempre hay un pero!-, esas dádivas tienen su correspondiente contrapartida.

Por tanto, si uno razona por qué gusta tanto a la Junta de Andalucía los estudios que realiza el CAPDEA, uno no tiene más que concluir que detrás de esta buena sintonía entre su equipo directivo y la cúpula del PSOE-A hay algo más. ¿No les extraña el resultado de la encuesta, con una diferencia de más de seis puntos entre el PSOE-A y el PP-A?

Pero vayamos al grano, y entenderán el por qué de mi reflexión anterior. Tanto en la ficha técnica del EGOPA (página 8 del Estudio) como en el Anexo de las variables sociodemográficas (página 158 del Estudio) se observa el reparto proporcional entre provincias del número de encuestas (1.200 encuestas), y que se supone (porque no lo dice) se hace exclusivamente en función de la población objeto de estudio, que corresponde a los mayores de 18 años residentes en Andalucía, que es el universo de la muestra.

En la tabla que viene a continuación se indican los datos de población mayor de 18 años residentes en Andalucía y por provincias (extraídos del INE -Instituto Nacional de Estadística- a fecha 01/01/2014), así como el reparto de las 1.200 encuestas telefónicas por provincia, y en otra columna el reparto que ha establecido el CAPDEA en el EGOPA. Observen bien lo que ocurre con las provincias de Almería y Málaga, curiosamente en las dos en que más apoyos encuentra uno de los partidos rivales del PSOE-A, el PP-A:

También es casualidad que el error del CAPDEA favorezca al PSOE-A. Si las 46 entrevistas de errónea ubicación se hubieran efectuado en la provincia correspondiente, ¿cuál hubiera sido el resultado del EGOPA? Téngase en cuenta que hubiera disminuido el número de entrevistas en las seis provincias restantes, Cádiz, Córdoba, Granada, Huelva, Jaén y Sevilla, en las que el PSOE-A suele tener mayores apoyos, y aumentado en Málaga (32 encuestas más) y en Almería (14 encuestas más). ¿Sería tan enorme la distancia entre el PSOE-A y el PP-A, y tan bajas las cifras de los demás partidos políticos?

Por otro lado, las entrevistas se han realizado entre el 8 y 31 de enero, habiéndose convocado las nuevas elecciones el día 27 de enero, un dato fundamental que hubiera podido cambiar el resultado del EGOPA si se hubiera extendido hasta el 7 de febrero, como el año anterior, en el que se efectuaron 3.200 entrevistas entre los días 8 de enero y 7 de febrero. ¿Estaría ya acordado que se hicieran este año menos entrevistas ante la inminente convocatoria de elecciones?

Creo que los andaluces, que mantenemos con nuestros tributos (impuestos y tasas) el funcionamiento de la Universidad de Granada, nos merecemos una explicación convincente de la Directora del CAPDEA, Dª. Carmen Ortega Villodres, cuya nómina pagamos todos los contribuyentes andaluces. Y si dicha explicación no fuera categórica, la Universidad debería adoptar una decisión elemental: mantener en su profesorado a una persona que manipula datos en sus investigaciones, en detrimento del prestigio de la misma (ocupa el puesto 183 en el ranking mundial, y el 62 en el europeo), o actuar conforme a la normativa interna de la misma, si es que dicha norma ha previsto algo para estos casos.

Y para ir concluyendo, debo indicarles que la encuesta del EGOPA no debe estar tan cercano a la realidad cuando el PSOE-A envió a sus militantes, el pasado viernes, un mensaje vía “sms” firmado por Susana Díaz, a fin de animarlos para la campaña electoral, muchos de los cuales han huido desengañados y deprimidos de sus agrupaciones, donde las cifras de bajas han sido escandalosas, y las de apoyo a los candidatos peores aún.

El PSOE-A sigue perdiendo votos en Andalucía, como otros partidos, y sólo podrá sobrevivir si Pedro Sánchez da un golpe de timón. El movimiento de ficha en Madrid es un aviso a navegantes para Susana Díaz, que no olvidemos, es la Secretaria General del PSOE en Andalucía. ¿Qué ocurriría si cesara a Díaz como ha hecho con Tomás Gómez? Tras unas horas de desconcierto, nada. Al día siguiente, todos los "incondicionales" que seguían a Susana Díaz seguirían a Pedro Sánchez o a quien pusiera de cabeza visible en Andalucía, porque de lo que se trata es de arrimarse al poder, es decir, a la persona que podrá seguir manteniendo a todos esos "incondicionales”, algunos para comer, y otros para seguir disfrutando de audis, langostinos, putas, cocaína, chalets con piscina, cuentas en paraísos fiscales y demás especialidades propias de un “socialista obrero”.

¿Y vende Susana la unidad del PSOE en Andalucía? Claro, es fácil conseguir “unidad” cuando el apoyo en las agrupaciones los consigue a base de nóminas en las Administraciones Públicas donde gobierna el PSOE-A. Que quite Pedro Sánchez a Susana Díaz de la Secretaria General y veremos el lamentable espectáculo de los apoyos con los que se quedaría. Esta es la realidad de una gran parte del pueblo andaluz, que ya no lucha por su libertad o sus derechos, sino por las prebendas de quien ocupe el poder. ¡Qué poca dignidad!